El Muro de los Lamentos o de las Lamentaciones, lugar sagrado para los judìos, es visitado por millones de turistas para dejar peticiones dirigidas a Dios en las ranuras de las piedras. Es sagrado para los judíos debido a que es una de las pocas partes que quedaron en pie luego de que los romanos destruyeran el Templo de Jerusalén y se convirtió en el lugar tradicional de oración.