La prisión de Tihar se encuentra ubicada a 7 km al Oeste de Nueva Delhi en la India, justo en el pueblo de Tihar, fue construida en 1958 y desde entonces ha ido creciendo a medida que la población reclusa de la india también hasta convertirse en el complejo de cárceles más grande del sudeste asiático, las terribles condiciones en que están las presas del ala seis de este complejo carcelario generó un revuelo mediático en este país cuando un popular canal de televisión denunció la situación y salió a la luz el trato degradante que soportan unas 600 mujeres hacinadas, sin instalaciones básicas, sin servicio médico y en muy malas condiciones de salubridad, pero aunado a esta situación tan difícil que viven las presas están siendo atormentadas por un fantasma que se lamenta todas las noches, esto no resulta difícil de creer ya que las cárceles están llenas de tristezas y mucho dolor y encierran vibras muy negativas, vibras oscuras, tomando en consideración que las personas que se encuentran ahí son delincuentes, son malas personas y esto puede atraer espíritus en un estado de inquietud, es por eso que las cárceles abandonadas y operativas, son algunos de los lugares más embrujados del mundo, pero hablando concretamente de las presas de la cárcel para mujeres en la India dicen que las instalaciones están embrujadas y que están siendo atormentadas por los espeluznantes lamentos de un espíritu que resuena por el lugar todas las noches, este fantasma llamado de la prisión de Tihar justo a las 2 de la mañana llega al módulo 6 y las presas comienzan a gritar, se trata del fantasma de una mujer que ha sido visto en varias ocasiones en las últimas semanas y aparentemente la han escuchado con escalofriante regularidad, la presencia de esta entidad ha llevado a las presas a un estado grave de pánico y ansiedad, las presas relatan que misteriosos gemidos se escuchan a partir de las 2 de la madrugada y las asusta tanto que no pueden dormir, y no paran de llorar y aunque las presencias fantasmales principalmente son durante las horas nocturnas, otras presas aseguran que han escuchado los lamentos también durante el día, esta situación ha terminado con la tranquilidad al interior del reclusorio y algunas presas se han suicidado para no tener que soportar el macabro sonido todas las noches y justo las versiones parecen coincidir en que el espíritu que grita es una antigua presa que fue condenada injustamente y se quitó la vida en lugar de vivir en ese lugar, aunque los más escépticos no están muy convencidos de que el sitio esté embrujado y afirman que las mujeres que escuchan los lamentos probablemente estén alucinando la realidad es que las reclusas no pueden dormir por los extraños sonidos y los dirigentes del centro de reclusión han recibido diversas peticiones para investigar estos sucesos paranormales a estas peticiones no se les da seguimiento y al contrario se minimiza la situación que viven las reclusas por las entidades que habitan en el lugar.
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