Las ancestrales tradiciones nórdicas ofrecen un rico espectro de deidades y personajes mitológicos, las fiestas para conmemorar el solsticio de invierno se conocían entre los vikingos y otros pueblos germanos como Yule o Yuletide, y se trataba de un festival precristiano que duraba doce días, rindiendo homenaje a la familia y a los amigos ausentes,

