La leyenda más famosa del Estado de Tlaxcala es la de las Tlahuelpuchis y se remonta al tiempo de los aztecas ya que en esos tiempos se conocieron como mujeres con poderes de un nahual y con la capacidad de tomar alguna forma animal o de vapor, también se les asociaba con las luciérnagas ya que tenían la capacidad de convertirse en fuego o escupirlo, estas mujeres vampiros se alimentan de la sangre de los recién nacidos mientras duermen y se dice que estas mujeres comienzan a desarrollar sus poderes luego de la primera menstruación y es en ese momento que salen a buscar alimentos a la medianoche y se transforman en animales o niebla para poder saciar su apetito y cuando encuentran a su víctima, sus padres son hechizados para que se hundan en el sueño más profundo y así dejar indefensas a sus víctimas; las tlahuelpuchis son mujeres comunes a la vista de todos y en su pubertad específicamente cuando tienen su primera menstruación. Ahí cuando entran cuando entran en contacto con el potencial de sus poderes y con el tiempo y la práctica, logran desarrollarlos por completo, hasta finalmente dominar la técnica de convertirse en animales, se dice que, una vez que logran tomar la forma de un animal, se desprende de ellas una luminosidad que advierte su presencia y hasta el día de hoy existen personas que dicen que han visto aquellas luces alejarse y acercarse, es por eso que muchas personas dejan objetos de metal, tijeras abiertas, una cajita de agujas, un cuchillo, alfileres y ajo cerca de los bebés para alejar a estas brujas y un espejo en la puerta para evitar que entren, otro dato interesante es que las tlahuelpuchis no atacan jamás a sus familiares, excepto si el secreto de su existencia es revelado por algún pariente a otras personas, estas brujas no trabajan en grupos, son muy territoriales, se reconocen en su forma humana y guardan su distancia unas de otras respetando su territorio, en Tlaxcala se les tiene mucho miedo ya que se cuenta que son muy agresivas.
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